La joven de 20 años es la nueva ganadora, con 18 votos.

Luego de dos años de postergación producto de la pandemia, vuelve una de las premiaciones más importantes del Festival de Viña del Mar, se trata de la reina del Ballet del certamen 2023, que esta vez coronó a la bailarina de 20 años, Catalina Adasme Alfaro.
Escogida por su grupo de trabajo conformado por un total de 31 personas, entre peluqueros, vestuaristas y bailarines, la joven oriunda de la comuna de Maipú, ganó con un total de 18 votos.
Ronald Saa, director de Maquillaje y Peluquería del Festival de Viña del Mar, quien lleva ocho años a cargo de las ediciones del espectáculo latinoamericano más grande del mundo, es además el fundador de esta premiación.
“Creamos esta coronación para valorar y premiar el carisma, el profesionalismo. Catalina llegaba súper relajada, amorosa, feliz, se acomodaba a la situación y pasaba por todos los puestos de maquilladores sin problema. Dar este espacio a gente joven ayuda a su crecimiento profesional”, indicó.
La joven bailarina, quien actualmente forma parte del equipo de bailarines de destacadas cantantes nacionales, comenta que desde niña una de sus sueños fue formar parte del staff del festival.
Fue así que tras postular a través de un video, quedó seleccionada para ser parte del exclusivo equipo donde habían intentado ingresar más de 1.500 profesionales a lo largo del país.
“Estoy demasiado agradecida, es mi primer año en el Festival y me voy con esta sorpresa. Nosotros solos (los bailarines) no somos nada, solo bailamos. Ellos son los que nos convierten en un artista, me di cuenta que nada es individual, todo es trabajo en equipo”, señaló.
En ese sentido destacó la “magia” que logran hacer con el equipo para las distintas etapas que comprende el show del Festival de Viña, y todo esto, en tan solo minutos.
Los premios entregados a la reina del ballet del Festival de Viña 2023, fueron una corona, un collar de piedras naturales, un conjunto de aros y un set de maquillaje.
Cabe destacar, que en la votación también fue escogido como rey feo, su compañero, el bailarín, Sandro Álvarez.