
La víctima se refería a la nieta, menor de edad, de su pareja. Los ilícitos ocurrieron entre los años 2014 y 2023.
A presidio perpetuo fue condenado un hombre de 76 años, por los delitos de abuso sexual reiterado a menor de 14 años, abuso sexual calificado en calidad de reiterado, violación reiterada y abuso sexual a mayor de 14 años.
La víctima se trataba de la nieta de su pareja y conviviente, la que estaba a cargo de su abuela desde los 3 años, mientras que los ilícitos comenzaron a ocurrir el año 2014, cuando la menor tenía 7 años y se prolongaron hasta el 2023, año en que se dieron a conocer los hechos.
El fiscal a cargo del caso, Álvaro Mancilla, durante la audiencia señaló que «estima que se ha logrado probar más allá de toda duda razonable los hechos materia de la acusación. Ello con la declaración de la afectada que fue clara en las épocas, lugares en que iban sucediendo los hechos y el daño asociado. Tiene recuerdos desde los siete años. Desde allí comienzan los hechos(…) Al momento de la declaración tenía 17 años, fue clara y convincente en sus dichos. Ella da cuenta de cómo el imputado efectuaba las acciones hacia Ella”.
En este sentido, el relato de la afectada fue clave para acreditar los hechos y lograr el veredicto condenatorio: “la víctima fue capaz, respecto de los hechos que se tuvieron por acreditados brindó un relato coherente, dando suficiente razón de sus dichos, quien en forma certera fue capaz de contextualizar los eventos que la afectarán, situándolos en relación al momento en que se verificaron, esto es, en años de su infancia -desde los 7 años esto es desde el 2014 a 2023- refiriéndose a varios recuerdos de sucesos en la casa del cerro Rocuant”, señala el fallo.