
Reproches se centraron en las «limitaciones» del Estado que adujo Boric. Otro tema omitido: la escasez hídrica.
La última Cuenta Pública del Presidente Gabriel Boric dejó transversalmente un sabor agrícola entre parlamentarios de la Región de Valparaíso. Si bien algunos valoraron ciertos anuncios de proyectos en marcha, como la apertura para este año del Hospital Marga Marga o el avance en la licitación del tren Valparaíso-Santiago, la mayoría coincidió en que faltó la profundidad en temas cruciales para la zona, especialmente en lo referente a la reconstrucción por el megaincendio de febrero de 2024 y la crisis hídrica que aún golpea al interior de la región.
La falta de autocrítica respecto al lento avance de la reconstrucción y la ausencia de anuncios concretos en materia de infraestructura hídrica fueron los cuestionamientos que, más allá de las posiciones políticas, dominaron entre los parlamentarios locales.
Por ejemplo, el senador Francisco Chahuán (ex-RN) fue particularmente duro al referirse a la reconstrucción a raíz del megaincendio. «Tenemos menos de un centenar de viviendas construidas de las millas que se quemaron. Y creemos, sin lugar a dudas, que acá no ha habido coordinación con el Gobierno local, el Gobierno Regional, el Gobierno Nacional», manifestó con molestia, aduciendo que en su discurso el Mandatario «le echó la culpa al Estado», cuando «el Estado lo lidera el Presidente de la República».
En esa línea, el diputado Andrés Longton (RN) coincidió en que «el presidente no hizo ninguna autocrítica en materia de reconstrucción», reprochándole que como país «tenemos experiencias exitosas con el Presidente Piñera». Según recordó, hasta ahora «el proceso ha sido lento, burocrático y hoy día gran parte de las familias no tienen sus casas reconstruidas».
Junto a él, la diputada Chiara Barchiesi (Partido Republicano) señaló que «el mejor reflejo de la nula preocupación regional en la Cuenta Pública del Presidente Boric fue el abandono a los damnificados del megaincendio que lo esperaban afuera del Cerro Castillo», lamentando que este es su «segundo invierno sin casa, sin reconstrucción, mientras que su promesa de no dejarlos solos quedó hecha trizas frente a la realidad».